Cómo depurar el organismo después de Navidad

Cómo depurar el organismo después de Navidad: Te mostramos 5 consejos para depurar el organismo después de Navidad. ¡Elige tu rutina más saludable!.

Cómo depurar el organismo después de Navidad: Depurar el organismo después de los excesos navideños no tiene porqué ser algo molesto. Es más, podríamos decir que puede llegar a ser algo placentero y divertido. Porque, ¿a quién no le apetece un paseo por el campo? ¿Y un buen masaje? Conoce los beneficios de estas dos y otras técnicas a la hora de eliminar toxinas.

Una buena alimentación: la alimentación es muy importante a la hora de eliminar toxinas. Algunas de las mejores recomendaciones: comer alimentos ricos en fibra como por ejemplo los cereales, evitar las bebidas alcohólicas y la cafeína o hacer un especial hincapié en ciertos alimentos depurativos como los espárragos de Navarra.

Beber mucha agua: lo recomendable es beber unos 2 litros de agua al día, lo que equivaldría a 8 vasos de agua aproximadamente. Recuerda que el 75% de nuestro peso se debe al agua,  por lo que es importante recuperar las pérdidas que sufrimos de manera natural a lo largo del día. Otra manera de hidratarnos sería ingerir alimentos con un alto contenido en agua como la fruta y las verduras.

Recibir un buen masaje: eso sí, siempre por un profesional capacitado. Un masaje intenso centrado en los puntos de presión de los músculos donde las toxinas se acumulan puede ayudarnos a su eliminación. La acupuntura también es un tratamiento llevado a cabo por muchas personas para eliminar el exceso de toxinas en los puntos de presión.

Respirar aire puro: sabemos que el ritmo de vida de hoy en día a veces no nos permite disfrutar de demasiado tiempo en el campo, pero disfrutar del aire puro de la naturaleza sin la contaminación de las ciudades nos hará sentirnos mejor tanto por dentro como por fuera.

Realizar algo de ejercicio: unas 4 o 5 sesiones de 30 minutos a la semana pueden hacernos experimentar grandes beneficios sobre nuestro organismo: hacer que el cuerpo se mueva y se mantenga a plena capacidad hace que se liberen las toxinas a través de la transpiración y nos ayuda en nuestro proceso digestivo y circulatorio.